No es tanto que los empleados sean felices, sino que estén comprometidos.
El Compromiso es una actitud operativa y exigente por la cual el empleado pone su ambición, sus aspiraciones y su energía a resolver los problemas, los objetivos y los proyectos de la empresa.
Todos los empleados tienen algún nivel de Compromiso, porque acuden al trabajo, realizan tareas, cumplen las normas, asumen responsabilidades, o manifiestan un vínculo emocional con la empresa.
Pero la cuestión está cuál es el porcentaje de ganas y de energía que el empleado pone a disposición de los retos y de los desafíos de la empresa… y de qué depende esa mayor o menor proporción