Yo me encontraba recorriendo las instalaciones de un nuevo cliente en mi primera visita física. Era un proyecto para mejorar la comunicación entre Compras, Fabricación y Ventas, y todos estuvimos de acuerdo en que yo debía conocer todo el emplazamiento de aquella empresa de alimentación. Me había contratado el Director General, con quien tenía programada una reunión a las 5 de la tarde.
Al entrar en el taller de Mantenimiento, en la pared a la izquierda del banco de trabajo había un calendario anticuado de Miss Marzo, una fotografía con la imagen de una señora desnuda. Al preguntar al Director de Producción si era consciente de ello me respondió: “Sí, y espera a ver a la señora de abril”.
Le argumenté lo inapropiado de este tipo de “manifestaciones” y él me dijo que se trataba del taller de mantenimiento, que ningún cliente iba por allí y que, siendo hombres las 6 personas que trabajaban en ese lugar, ninguno de ellos se oponía al calendario.
«Los de mantenimiento siempre ha sido así», concluyó.
Aquella tarde me reuní con el Director General tal y como estaba previsto y le conté exactamente lo que había sucedido. Se enfureció y pensó en ir de inmediato al taller él mismo. Pero le convencí para que se sentara, ya que allí tenía tres problemas.
“¿Tres?”, repitió.
Le dije que el primero era la presencia del calendario y que debía ser eliminado, desde luego.
Pero, en segundo lugar, su presencia seguramente sería la manifestación de otros objetos, actitudes y comportamientos discriminatorios o inapropiados en la fábrica, y que sería adecuado investigarlo todo. Rara vez ocurren cosas de este tipo de forma aislada.
Y, tercero, su departamento de Recursos Humanos obviamente estaba desconectado de la realidad, ya que este hecho no sólo debería haber sido detectado en inspecciones rutinarias, sino que debería haber sido trabajado en las sesiones de formación y capacitación habituales.
“¿Y tú puedes ayudarme con los tres?”, preguntó.
“Sí, creo que puedo”, le contesté.
Esto no ocurrió en los años 80 del pasado siglo. Esto ocurrió en 2022.
También estaré encantado de escucharte a ti si te pones en contacto conmigo: garrido@freshmentoring.com