Por José María Garrido

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Hace muchos años, justo cuando yo llevaba tan sólo unos meses como director de Calidad de mi empresa Vega Mayor (fabricación de ensaladas IV Gama), apareció una noticia (recuerdo que incluso los telediarios se hicieron eco de ella) porque una revista de consumidores (…que sin duda buscaba aumentar su tirada de suscriptores) anunció que “las ensaladas que se consumen en los establecimientos de fast food tiene restos fecales”.

Poco después descubrimos que se trataba de que los análisis microbiológicos de las ensaladas daban determinados recuentos de “coliformes fecales”, cosa que, aunque suene realmente mal para un profano, es un resultado absolutamente normal en este tipo de producto y que, de hecho, es un parámetro de análisis que no debe ser usado en las ensaladas, como años después confirmó la correspondiente directiva de la UE (y lo dejo aquí, que no pretendo aburrirte con temas técnicos).

Pero, como puedes comprender, el “revuelo” que se montó fue de aúpa y nuestros clientes se pusieron muy nerviosos.

El caso es que recibimos la visita de un experto europeo de una de las principales cadenas cliente para hacer la correspondiente auditoría. Mi empresa tenía un año de actividad y yo llevaba tan sólo 3 meses en el cargo, así que el nerviosismo se palpaba en el ambiente.

Cuando el auditor puso su pie en el almacén general de la empresa (la planta de fabricación estaba perfectamente aislada, a no menos de 50 metros de la entrada del almacén), me dijo “No necesito ver más: con esa telaraña que veo sobre esta puerta (¡del almacén!) ya tengo suficiente”. Pero afortunadamente, la auditoría continuó…

Y hablamos de los FBR (Foreign Bodies Risks).

Al terminar, fuimos a tomar un café a uno de los bares del pueblo, y fue allí donde me comentó, eso sí, sonriendo: “No me extraña que te resulte difícil mantener un adecuado nivel de limpieza y orden en la fábrica…”. Lo decía señalando a la cantidad de servilletas de papel, huesos de aceitunas y palillos usados que se extendían por el suelo del bar…

Pero también hablamos de muchas cosas más (recuerdo que, como yo mismo, el era muy aficionado a la música), aunque el asunto que más grabado se me quedó de aquella jornada fue cuando el experto auditor me dijo: “Hasta que no le des la vuelta a la pirámide organizativa, no conseguirás nada.”

Estaba hablando de la importancia de las Personas, de cómo los operarios y sus mandos son los elementos esenciales a tener en cuenta a la hora de afrontar el futuro de la empresa.

Aquella conversación sentó las bases de uno de los elementos clave que marcaron la cultura de mi empresa y, por tanto, de su éxito indiscutible posterior: el Compromiso de los Empleados, y de qué hacer para conseguir maximizarlo.

Hoy, observo que tenemos FUD (Fear, Uncertainty, Doubt, o sea, miedo, incertidumbre y dudas). Los empresarios dudan de actuar, asumir riesgos, comprometerse. Se sienten decepcionados y se ahogan por las malas de los medios de comunicación, la política, la situación económica, y también por una cierta sensación de culpa constante.

Limpia todas las telarañas, basura y palillos usados que están en el piso de tu organización. Levanta la cabeza y mira hacia el futuro. Los problemas, el FUD, no son inevitables ni irresolubles. Toma el mando de tu empresa y de su destino.

Tus empleados y el valor que atesoran son la auténtica energía de tu proyecto empresarial.

Porque cuando consigues aglutinar a tus Personas con tu Liderazgo hacia una Visión, todo adquiere una fuerza formidable.

No hay nada que no puedas superar.

 

“Desafortunadamente, a menos que estemos enfocados en desarrollar nuestro coraje, lo que nos brinda nuestra confianza en nosotros mismos y todo lo que necesitamos para conseguir el éxito, la voz del miedo siempre llevará la voz cantante dentro de nuestras cabezas.” —Debbie Ford

“Darles a las personas la confianza en sí mismas es, con mucho, lo más importante que puedo hacer. Porque entonces actuarán.” —Jack Welch

“El éxito no se mide por lo que logras, sino por la oposición que has encontrado y el coraje con el que has mantenido la lucha contra probabilidades abrumadoras.” —Orison Swett Marden

José María Garrido es profesional agroalimentario, consultor y docente. Después de trabajar 24 años como directivo, en la actualidad ayuda al empresario a aumentar el rendimiento consistente de su organización. Leer más...

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